Sin tiempo para digerir su debut en el Campeonato de Europa sub 23 disputado en Águilas (Murcia), María Ortega ya piensa en el Nacional de Triatlón que se celebrará este fin de semana en Pontevedra. En él, tiene el objetivo de luchar por el triunfo en su categoría y ganar puntos de cara a crecer en el ranking.

La mejor noticia de la toledana es que se encuentra «en muy buen estado de forma, aunque espero que el rendimiento en esta competición sea diferente y lo haga mejor que en el Europeo». De hecho, confía en «acabar en los puestos delanteros». Más concretamente, su deseo pasa por superar la actuación del curso pasado, cuando terminó quinta en la categoría absoluta.

Asimismo, su gran aspiración pasa por «conseguir ganar en mi categoría, aunque sé que será complicado, porque se trata de mi último año como triatleta sub 23». De esta forma, no duda en señalar que «voy a salir a por el oro, aunque luego después nunca sabes cómo puede darse la carrera».

Otro punto a favor de María Ortega se focaliza en su conocimiento del circuito que se encontrará en tierras gallegas. En especial, se centra en su análisis del tramo de bicicleta, que puede resultar sencillo y en el que espera ir «bastante bien, porque sólo tiene una pequeña cuesta y no incluye demasiados giros, que a mí siempre me resultan más complicados».

Por lo que se refiere a la carrera a pie, donde intentará llegar en el grupo de las mejores, revela que el recorrido «transcurrirá por las calles». En esta última parte de la prueba es donde buscará dejarse sus últimas fuerzas con la intención de marcar las diferencias con sus rivales y, a ser posible, que suceda lo mismo que en el Europeo de Águilas, donde no pudo rendir a su nivel.

Rivales. Por lo que se refiere a la competencia que tendrá María Ortega en el Nacional de Pontevedra, serán prácticamente «las mismas rivales que en el Campeonato de Europa», por lo que se presume que tanto Carolina Routier como Anna Godoy intentarán ponerle las cosas difíciles a la toledana en su pelea por alcanzar el título.

Asimismo, María Ortega se fija en la participación extranjera, que puede condicionar que la prueba se haga más exigente y con un ritmo más duro. En este sentido, resalta el nombre de una triatleta alemana, Ricarda Lisk, quien por suerte para ella podrá optar a los premios económicos que se repartan en el triatlón pero no a la lucha por las medallas en el Campeonato de España.

Por lo que se refiere a la participación en la prueba absoluta, la toledana avanza que «las tres olímpicas probablemente no acudirán, por lo que creo que Marta Jiménez es la que tiene más opciones de llevarse el triunfo».

Una competencia muy exigente que añade aún más interés a una competición en la que María Ortega tiene puestas muchas esperanzas. Su meta es ambiciosa puesto que quiere adjudicarse el título de campeona de España sub 23, pero se trata de la última oportunidad que tiene para hacerlo y no la quiere desaprovechar.