Vega Baja no podía faltar como tema estrella en el desayuno informativo de La Tribuna junto a UFD (Grupo Naturgy)porque la futura implantación del cuartel de la Guardia Civil ha vuelto a reabrir el debate. En este sentido, el presidente de la región, Emiliano García-Page, envió un mensaje «de tranquilidad» porque se trata de una zona «en la que nunca va a pasar nada en contra de la legislación». Además, subrayó en varias ocasiones que todas las administraciones «irán de la mano» para que esta zona mantenga la máxima protección y disponga de «una regulación protectora de máximo nivel».
Page, consciente de la proyección mediática que está acaparando Vega Baja en las últimas semanas, tras la alerta de Icomos, el organismo de la Unesco, sostuvo que en la ciudad de Toledo «tiene suficiente acuerdo la alcaldesa con el resto de administraciones para que lo que se haga no nos enfrente, aunque podamos tener matices». Por tanto, tiene claro que el Ayuntamiento «no se va a dejarse llevar por tentaciones absurdas» y dio a entender que tampoco permitirá que una zona protegida sufra daños por un futuro desarrollo.
«Sobre Vega Baja no hay nada que temer de fondo», repitió una vez más, pero entiende que la polémica y las protestas que se asoman de vez en cuando tienen una misma raíz, la falta «de buenas explicaciones» que en su momento, con la paralización del proyecto de construcción de viviendas hace más de diez años, no se facilitaron a pesar de que en aquellos momentos la paralización «la aprobó todo el mundo». Al respecto, subrayó que entiende «las críticas del empresariado» porque nunca se comentó «por qué se había trabajado durante tanto tiempo en un proyecto urbanístico y se paró de repente».
Si bien, el presidente de la región insistió en que la legislación es clara y en caso de que puedan surgir conflictos se acatará la normativa, «que es muy estricta», con lo que considera innecesario que el tema pueda suscitar protestas porque «no harían falta» si se tiene claro que se trata de una zona protegida, «que está a salvo y va a tener una regulación protectora para el futuro de máximo nivel».
Cuartel. La parcela elegida para la futuras instalaciones de la Guardia Civil ha avivado la alerta, pero Page destacó ayer que los terrenos elegidos se encuentran «en la periferia de la zona protegida» y recordó que en su momento, «todos los actores y opinadores llegaron a un acuerdo sólido para que se pudiera completar» el barrio y la ciudad. También en su momento, subrayó, el Ministerio de Defensa cedió mucho terreno a la ciudad, «sin especulación alguna», y aprovechó para agradecer el gesto a Carme Chacón antes de continuar dejando claro que a cambio «en una determinada zona» se tenía que levantar un edificio «de servicios» que, en principio, iba s er de oficinas. Si bien, ahora el proyecto iría dirigido a una infraestructura pública, «un cuartel muy necesario» en Toledo, pero también remarcó que si en algún momento «hay un problema de cata arqueológica no hace falta carteles ni protestas porque se tiene que someter todo a la legislación».
Respecto al futuro de Vega Baja como yacimiento arqueológico, Page se remontó a la crisis económica para dejar claro que el proyecto no salió adelante por cuestiones económicas y avanzó que una excavación «elemental y mínima en Vega Baja para saber si hay algo cuesta 26 millones de euros y con eso puedo abrir literalmente en la provincia ocho centros de salud». Por tanto, destacó que Vega Baja exige ir ‘todos a una’.