«Muchos de los que convivían conmigo ya están muertos»

Jaime Galán
-

Víctor Serrano es un toledano que se fue voluntariamente a Ucrania. Bombardearon su base militar cuando él estaba en Kiev. Allí se dedica a la ayuda humanitaria y a formarse militarmente. Solicita ambulancias y vehículos para uso sanitario

Imagen de Víctor Serrano en un refugio. - Foto: Telecinco

No es militar ni se formó para ello. Simplemente, las imágenes que a todos nos llegaron desde Ucrania le hicieron decidirse a acudir en la ayuda de este país invadido por vocación y voluntad propia. Su nombres es Víctor Serrano, es natural de Toledo, y a sus 23 años trabajaba en un almacén mientras cursaba sus estudios. Él fue uno de los  pioneros en alistarse a una legión internacional por sus propios medios en el país ucraniano. No ha sido tarea fácil contactar con él, y más aun cuando los rusos bombardearon la base militar en la que él se refugiaba. Por suerte para Víctor Serrano, en el momento en el que los misiles rusos impactaron en este lugar, él se había trasladado temporalmente hasta la capital del país, Kiev.

La base militar citada es la que sufrió el ataque la madrugada del pasado domingo, y lo que muchos expertos consideraron un aviso para la OTAN, al situarse la misma a tan solo 25 kilómetros de la frontera con Polonia. Allí se refugiaban decenas de personas de diferentes nacionalidades que estaban realizando ayuda humanitaria a los afectados del propio país, además de recibir formación militar por si les tocaba defender el territorio. Pocas horas después del bombardeo, Víctor Serrano contactó con La Tribuna. A las 8:41 horas del domingo, el redactor que firma estas líneas recibió la siguiente comunicación: «Estoy en Kiev. Estamos en peligro. Necesito enviar un mensaje». Serrano no volvió a responder a los mensajes hasta el lunes a las 11.59 horas con el siguiente texto: «Estoy vivo, aunque otros no han sobrevivido. Hablaremos cuando todo esté mejor. Un abrazo». Finalmente, la llamada se produjo y en ella Víctor Serrano relata que su base fue destruida mientras él se encontraba en Kiev. Ahora ha vuelto a Lviv, provincia donde se encontraba el refugio, junto a legionarios que sobrevivieron al bombardeo. «Ahora tenemos que reubicarnos y construir una base nueva. La mayoría de los que convivían conmigo ya están muertos y otros están muy afectados». Su misión ahora es « buscar cobijo, comida, nuevo equipamiento e intentar hacernos con otra base».

Serrano se encuentra allí realizando ayuda humanitaria porque no puede combatir:  «al frente solo van los que tienen experiencia militar o hablan ucraniano a la perfección. Además, ir allí es una sentencia de muerte». Mientras tanto, el voluntario toledano compagina la ayuda a los demás con su formación militar, según él, por si en algún momento requieren que defienda el territorio. Él también cuenta que llegó a Ucrania por sus propios medios, «fui pionero», y una vez allí encontró los contactos para alistarse a una legión internacional que es «el enlace no oficial del Ejército Regular de Ucrania». 

Alrededores de Yavoriv, localidad donde se encontraba su base militar. Alrededores de Yavoriv, localidad donde se encontraba su base militar. - Foto: TVEVíctor Serrano destaca que la prioridad para ellos es recibir equipamiento militar, porque denuncia que a los soldados les falta material para poder replegar a los rusos, y cita «cascos kevlar, chalecos antibalas y armas». Aunque no se olvida de los medios sanitarios. Para Víctor es más que necesario que alguien done o venda ambulancias, «si hace falta las compramos, pero necesitamos que alguien las traiga hasta Polonia y las recogemos en la frontera». Y es que relata que los médicos apenas tienen vehículos para trasladar a los heridos o fallecidos, por lo que cualquier medio para los sanitarios será bien recibido. Explica que demandan estos vehículos porque «la estrategia de los rusos es dispararlas para que no contemos con ellas. Las necesitamos para rescatar gente y si nadie las dona o las vende no podremos conseguirlas».

Pese a que la mayoría de su viaje lo ha pasado en Lviv, durante varios días ha estado en Kiev. De la capital, el toledano cuenta que «los rumores apuntan a que en una semana o en menos tiempo va a ser una catástrofe humanitaria, porque  no tendrán ni agua, ni comida. Es importante que envíen suministros allí».