Renovarse o morir. Una frase que encaja a la perfección con esa nueva perspectiva de estudio de las Humanidades, ya que desde hace unos años todo lo relacionado con este amplio campo, que incluye el patrimonio, se ha abierto «a la realidad digital» que está ayudando a conseguir «una nueva manera de pensar y de producir conocimiento». Es el resumen que ofreció ayer la organizadora de este IV Congreso de Humanidades Digitales y Patrimonio Cultural, María Ángela Celis, también profesora de Filología Hispánica y Clásica de la Universidad de Castilla-La Mancha y miembro de la Asociación de Humanidades Digitales Hispánicas.
La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha impulsado esta edición, junto una lista de patrocinadores que cuenta con las Cortes de Castilla-La Mancha, la Diputación, el Ayuntamiento y Educación 3.0, que reúne en Toledo a alrededor de 200 personas, fundamentalmente estudiosos, expertos y profesores, que comparten una intensa agenda centrada en nuevos enfoques metodológicos, herramientas digitales, la enseñanza en relación a las TIC y una serie de programas informáticos que allanan el camino hacia las humanidades digitales.
En la edición anterior este reconocido congreso se celebró en Málaga, pero esta vez se ha puesto el foco en Toledo, una ciudad Patrimonio de la Humanidad que reúne todos los ingredientes relacionados con el arte y el patrimonio que conducen a «un nuevo renacimiento que supera las barreras que se nos estaba poniendo a los humanistas tradicionales». Celis valoró el esfuerzo de la Facultad de Humanidades en la organización del congreso e insistió en que la actualidad poco tiene que ver con el estudio de las Humanidades en el pasado. «Todos los saberes humanistas se ven nutridos de los estudios de la digitalización».
En este caso, Celis tiene una idea muy clara de las herramientas y de los programas informáticos que conducen a la nueva perspectiva. «Existe la idea de que en el siglo XXI ningún humanista puede serlo si no es también conocedor de la realidad digital y no trabaja con los instrumentos que proporciona la técnica».
un invitado de lujo. A este primer día de congreso asistió el sociólogo belga Derrick de Kerckhove, de la Universidad de Toronto, para ofrecer la ponencia inaugural. Como experto, insistió en las posibilidades del ámbito digital. «Más que nunca, podemos decir que estamos a hombros de gigantes, ante un nuevo Renacimiento que, de alguna manera, supera todas las barreras que se han podido poner tradicionalmente a los humanistas porque las humanidades no se acaban, no se pueden acabar y, en este momento mucho menos, porque estamos trabajando con los artefactos de la tecnología».