Al menos 38 personas murieron este miércoles en Birmania en una nueva jornada de protestas contra la junta militar violentamente reprimidas por las fuerzas de seguridad, según la enviada especial de la ONU, Christine Schraner Burgener.
"Hoy fue el día más sangriento desde que ocurrió el golpe", dijo Schraner Burgener en una conferencia de prensa para repasar la situación en el país asiático desde que los militares tomaron el poder el mes pasado.
Las manifestaciones en rechazo del golpe militar continuaron este miércoles a lo largo del país, a pesar de la brutal represión policial, que solo el domingo se había cobrado la vida de 20 manifestantes, la mayoría a causa de disparos de la Policía.
Al menos 18 muertos en nuevas protestas civiles en Birmania - Foto: NYEIN CHAN NAING"La lista de fallecidos puede aumentar", ha advertido el portavoz de esta asociación, Ko Bo Kyi, en su cuenta de Twitter, desde la que ha asegurado que hay "muchos" heridos y que "algunos están en situación crítica". Entre las víctimas habría menores de edad.
Las fuentes locales también han confirmado fallecidos en la principal ciudad del país, Rangún, en Mandalay y en otras áreas de la misma región, después de cuestionar un día más la labor de las fuerzas de seguridad.
Entre los elementos utilizados para reprimir las manifestaciones, las autoridades habrían recurrido de nuevo al fuego real, a pesar de que teóricamente la junta reclamó públicamente a las fuerzas de seguridad que no utilizasen balas reales para contener las manifestaciones -o al menos salvo amenaza evidente para su integridad-.
Al menos 18 muertos en nuevas protestas civiles en Birmania - Foto: LYNN BO BOLa oficina de Derechos Humanos denunció que solo el domingo perdieron la vida 20 manifestantes, mientras que la cifra de detenidos desde el golpe supera ya los 1.200, entre ellos la anterior líder 'de facto' del Gobierno, Aung Suu Kyi, y el expresidente Win Mynt, según un recuento publicado por 'The Irrawaddy'.
La crisis birmana protagonizó el martes una reunión de ministros de Exteriores de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), que concluyó con un tímido y generalizado llamamiento a la estabilidad, y también está previsto que el asunto sea tratado por el Consejo de Seguridad de la ONU, previsiblemente el viernes y a puerta cerrada, según la agencia DPA.