Guarrazar seduce a Alemanía, Portugal y al CSIC

C.M.
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El equipo del yacimiento arqueológico ha captado el interés del CSIC y la Facultad de Ciencias del Medio Ambiente de la UCLM y, en breve, firmará un acuerdo de colaboración en investigación con la Universidad Trás-os-Monte e Alto Douro de Portugal

Guarrazar seduce a Alemanía, Portugal y al CSIC - Foto: ï»VÁ­ctor Ballesteros

Los trabajos desarrollados en el yacimiento de Guarrazar -auspiciados en el proyecto ‘Guarrazar: Arqueología y Nuevos Recursos’ dirigido y coordinado por Juan Manuel Rojas Rodríguez-Malo- han concitado el interés de instituciones como el CSIC y la Facultad de Ciencias del Medio Ambiente de la UCLM, con quien el equipo director del lugar ha firmado convenios de colaboración (en actividades de investigación y divulgación cultural, educativa y científica) a los que, en las próximas semanas, se unirá la rúbrica de un acuerdo de colaboración en investigación con la Universidad Trás-os-Monte e Alto Douro de Portugal.

La atención prestada por instituciones académicas referentes en investigación contrasta con el desinterés del Gobierno regional a la hora de conceder a este proyecto las ayudas relativas a este ámbito.

En este punto, resulta chocante que este impulso regional no acabe de llegar -sólo se concedieron ayudas para investigación en 2014 y 2017- cuando la alemana Fundación Eleonora-Schamberger acaba de conceder una partida de 8.000 euros al yacimiento para realizar un estudio geofísico en varias parcelas de Guarrazar. La solicitud la realizó Christoph Eger -como miembro del equipo de investigación arqueológica de Guarrazar- a través de la Universidad de Berlín.

Pero no se queda ahí el valor que desde fuera de esta comunidad se concede al lugar, porque la Fundación Palarq -entidad privada y sin ánimo de lucro que se crea con la finalidad de apoyar las Misiones Arqueológicas Españolas- acaba de asignar al proyecto la financiación de  4.600 euros para poder ejecutar el programa de metodologías analíticas a dos tipologías cerámicas halladas en el yacimiento. La primera se trata de cerámica de cocina, y la segunda de cerámica usada para vajilla.

incumplimientos. La visita del presidente regional y del anterior consejero de Cultura al yacimiento, el 2 de junio de 2017, hizo albergar, en el equipo director, la esperanza de poder contar, al menos, con una pequeña ayuda destinada a la renovación y creación de nuevo material didáctico para el yacimiento. La solicitud, tramitada el pasado mes de abril a instancias del propio consejero, todavía no ha recibido ningún tipo de respuesta.

El contenido de esta ayuda, si se materializara, sería lo único que puede recibir Guarrazar de lo que los responsables regionales ofrecieron como ayuda durante la citada visita. En ese encuentro, también se comprometieron a impulsar la visita de los centros escolares, aunque lo cierto es que ya han pasado ya dos cursos lectivos y los colegios que recorren el yacimiento son los que se gestionan desde Guarrazar. En este ámbito, conviene destacar que este curso han pisado el lugar un total de 15 centros educativos, seis de ellos llegados de Madrid y uno de China, en concreto del Instituto de Idiomas Extranjeros del Parque Industrial de Suzhou. Esto es, 659 alumnos han conocido el valor (patrimonial, arqueológico y medioambiental) contenido en un proyecto sostenible e integrado en el medio en el que se ubica.

Sobre la presencia positiva del Gobierno regional en Guarrazar -por ellos mismos calificado como «un yacimiento que aglutina importante información de carácter histórico y arqueológico sobre el reino visigodo de Toledo, no sólo de interés local o regional, sino también nacional e internacional (...), lo que le convierte en un lugar único y representativo de la época hispano-visigoda»-, el equipo hacedor de esta gestión se siente agradecido con la concesión de tres talleres de empleo -en 2013, 2018 y 2019-.

Sin embargo, Guarrazar necesita tener un mínimo de fondos para investigar y, también, una mínima ayuda institucional para dar visibilidad al yacimiento y a un proyecto para nacido bajo la premisa de  cumplir con la función principal de transmitir a la sociedad los conocimientos sobre el patrimonio histórico-arqueológico y medioambiental. Saberes que, indudablemente, contribuyen a su sostenibilidad.