La denuncia es la única salida. Es el mensaje que se lanza desde del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género desde hace tiempo, pero esta vez su presidenta, Ángeles Carmona, añade que las cifras de denuncias crecen y demuestran que «las víctimas confían cada vez más en las instituciones que nos dedicamos a luchar contra la violencia machista, confían en los jueces y juezas, en las Fuerzas de Seguridad del Estado y en la red de protección que entre todos tratamos de tejer a su alrededor y que, en la inmensa mayoría de los casos, salva vidas».

Este órgano, dependiente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) indica en líneas generales que el primer trimestre del año se ha saldado con un repunte del 19,3% de denuncias y del 17,8% del número de víctimas si se compara con los datos del mismo periodo de 2021. En líneas generales, las cifras indican una mayor actividad judicial a pesar de que hay que tener en cuenta que el primer trimestre de 2021 estuvo marcado por las consecuencias de la pandemia. Aun así, Carmona pone en valor los datos e insiste en la necesidad «de no bajar la guardia» ante esta lacra. 

La estadística reserva un espacio a la provincia de Toledo, que  también sigue la tendencia nacional, aunque no en todos los indicadores, ya que los juzgados han registrado 508 denuncias de enero a marzo, un 6,7% más que las ingresadas en el último trimestre de 2021, pero un 1,3% menos que las que recibieron en el primer trimestre de 2021. Por otra parte, los datos relativos al número de víctimas también demuestran variaciones, puesto que se han contabilizado 464 mujeres que han decidido dar el paso y han acudido a la Justicia en estos primeros meses del año, 16 más que el cuarto trimestre de 2021, pero 37 menos que hace un año.

El Observatorio sigue poniendo el foco en el entorno familiar de las víctimas porque casi nunca denuncian la problemática, ya que únicamente figuran en el 1,58% de las denuncias si se analizan los datos de ámbito nacional. Si bien, la situación se repite a nivel provincial porque en Toledo, únicamente denunciaron en once casos. 

La intervención policial suele ser fundamental. Normalmente, las víctimas no se acercan directamente a un juzgado a denunciar su caso -en el primer trimestre del año solo lo hizo una-, pero sí participan en la mayor parte de las denuncias por atestados policiales. Aun así, también se han contabilizado 54 denuncias con intervención directa de la Policía y hay constancia de catorce  partes de lesiones. 

Menores. La dispensa de la obligación de declarar sigue siendo un motivo de preocupación en los juzgados. En Toledo, hubo 33 víctimas en el primer trimestre que finalmente rechazaron declarar contra su agresor, lo que supone un 15,3%. Nuestra provincia supera la media nacional, situada en un 9,41%. Si bien, se observa un descenso del 0,8% en el número de dispensas respecto al cuarto trimestre de 2021. La estadística está a la espera de ir rebajando las cifras en consonancia con la reforma del artículo 416 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal aprobada el año pasado, y ahora las víctimas tienen obligación de declarar si han denunciado y declarado siempre que conozcan las consecuencias que tiene la denuncia, con lo que la Fiscalía puede contar con un elemento de prueba para mantener el proceso abierto.

Más datos. Las condenas se alejan de las cifras que se han ofrecido en otros trimestres. De enero a marzo los juzgados toledanos enjuiciaron a 103 varones, con el 80,6% de sentencias condenatorias. Si bien, los datos indican un 4,9% de fallos condenatorios menor que los impuestos en el mismo periodo de 2021.

Respecto a la tipología del delito, en Toledo no se han contabilizado asesinatos ni homicidios en este primer trimestre y la mayor parte de los hechos delictivos se corresponden con delitos de lesiones y de malos tratos. Sin embargo, el Observatorio vuelve a incidir en la gravedad de la violencia machista y recuerda que en lo que va de año han sido asesinadas 18 mujeres y un menor en España, que se suman a la horrenda lista de 1.148 víctimas y 47 menores muertos a manos de sus agresores, según los datos que se contabilizan desde enero de 2003.

Las medidas de protección, tanto penales como civiles, siguen siendo claves en este tipo de delitos. En este primer trimestre del año se solicitaron 116 órdenes de protección en los juzgados de la provincia y finalmente se adoptaron 98, un 34,2% más que durante el mismo periodo en 2021. 

Las novedades legislativas también van dando sus frutos, como la medida civil de la suspensión del régimen de visitas, derivada de la aplicación por los órganos judiciales de la reforma del art. 544  de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que entró en vigor en 2021. Se trata de una medida muy demandada que está consiguiendo buenas cifras. En Toledo, los jueces acordaron suspender el régimen de visitas en 20 casos de enero a marzo, 17 de ellos también se había decretado una orden de protección. 

La estadística del Observatorio también pone de manifiesto un importante aumento  del 122%, ya que en el último trimestre de 2021 únicamente se adoptaron nueve suspensiones del régimen de visitas.