Los indicios de restos arqueológicos en la parcela de Vega Baja en la que se iba a ubicar el futuro cuartel de la Guardia Civil han dado al traste con los planes y ha obligado a buscar una alternativa para construirlo en una parcela de La Peraleda, tal y como anunció la alcaldesa de la ciudad, Milagros Tolón, el martes a mediodía. La noticia no ha sorprendido quizá porque el tema llevaba dando vueltas más de un año, pero a la oposición sí le ha extrañado porque no se ha informado antes de darlo a conocer.
«A la oposición no le sienta nada bien lo que sea para mejorar la ciudad», apunta Tolón sobre este asunto. La alcaldesa asegura que los trámites se están realizando de la manera correcta gracias a las negociaciones que se están manteniendo entre administraciones desde hace tiempo.
En este sentido, indicó que este tipo de proyectos exigen reuniones, conversaciones y acuerdos con ministerios, como Cultura o Interior, en este caso, y contactos con la Real Fundación de Toledo, y la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas, dos entidades muy ligadas a la ciudad. Por tanto, Tolón subraya que le corresponde al «Gobierno de la ciudad», elegido «legítimamente», liderar esas negociaciones y posibles acuerdos.
Ciudadanos se mostró muy crítico con el anuncio del cambio de ubicación poco después del anuncio, pero no por el hecho de que salga de Vega Baja, sino por encontrarse con la noticia de golpe. Si bien, Tolón tiene claro que no se trata de un tema «de partidos políticos» y sostiene que el asunto pasará por comisión de Urbanismo una vez que se reciba el informe del georradar de la parcela en la que se iba a ubicar el cuartel en un primer momento.
Por otro lado, Tolón explica que el Ayuntamiento está a punto de llegar a un acuerdo para derribar las casas bajas del Paseo de la Rosa, pero no avanza fechas. Aun así, confía que el bulevar pueda completarse el próximo año.