La celebración del Corpus Christi es la mejor excusa para recordar la importante y desconocida figura del compositor sevillano Alfonso Lobo y Borja (1555-1617), que fue maestro de capilla de la Catedral de Toledo y uno de los polifonistas españoles más destacados del Renacimiento. El Coro Victoria, bajo la dirección de Ana Fernández-Vega, ha grabado recientemente una selección de algunas de sus piezas, con el título Sacred Vocal Music, para la firma Brilliant Classics.
Especialmente interesante es la pieza Libera me, Domine, para cinco voces, interpretada a partir del Libro de Polifonía n.º 24, transcrito y editado por Bruno Turner, que se conserva en el Archivo y Biblioteca Capitular de la Catedral de Toledo.
Nacido en Osuna en 1555, Alonso Lobo se formó en Sevilla con Francisco Guerrero (1528-1599), uno de los tres grandes compositores españoles del siglo XVI, junto con Tomás Luis de Victoria (1548-1611) y Cristóbal de Morales (1500-1553). Maestro de capilla de la colegiata ursaonesa en 1581, pasó posteriormente a trabajar para la importante catedral de Sevilla como asistente de su maestro, Guerrero.
En 1593 se convirtió en maestro de capilla de la Catedral de Toledo, permaneciendo instalado en esta ciudad durante algo más de una década -coincidiendo con figuras como Lope de Vega y el dramaturgo José de Valdivieso-, hasta que se produjo su regreso a la ciudad andaluza. Ningún otro músico español ha sido maestro de capilla de las dos catedrales españolas más importantes. Murió en Sevilla en el año 1617.
A pesar de la amplísima difusión de algunas de sus obras durante el Siglo de Oro -sus partituras llegaron hasta la América hispana-, Alonso Lobo cayó en el olvido en el XVIII y permaneció prácticamente ignorado hasta su descubrimiento en el tercer cuarto del XX por investigadores como Robert Stevenson y Bruno Turner.
La imagen reproducida en esta página procede del Liber Primus Missarum, impreso en Madrid en 1602, que Alonso Lobo dedicó al Cabildo de la Catedral de Toledo (no en vano, por encima del retrato del compositor, incluido dentro de una orla con reproducciones de instrumentos musicales, es posible apreciar la representación de la Virgen entregando la Casulla a San Ildefonso).
La grabación del Coro Victoria ofrece una breve selección de sus estilos en misas y motetes.
Esta formación, que toma su nombre del gran polifonista Tomás Luis de Victoria, es un ensemble coral especializado en música del Renacimiento. Los músicos que han participado en esta grabación han sido Elia Casanova, Manon Chauvin y Cristina Teijeiro (sopranos); Julieta Viñas y Beverley Green (mezzosopranos); Hugo Bolívar (contratenor); Francisco Braojos, Emiliano Cano y Jesús Navarro (tenores); Jagoba Fadrique y Oriol Mallart (barítonos), y Pablo Acosta (bajo). En una de las piezas ha participado también Manuel Minguillón a la vihuela. La directora del Coro Victoria es, desde su fundación, Ana Fernández-Vega.