José Pablo Sabrido, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo, se declara encantado de hablar sobre la Vega Baja en general y sobre el estudio del georradar en particular tras conocer que algún eurodiputado demanda esos datos desde Europa.

Sin embargo desde su puesto la primera respuesta consiste en echar balones fuera, primero señalando que el georradar lo pondrá la Junta de Comunidades a disposición de la euro cámara, está seguro, y confirmará que es adecuado lo que se está haciendo allí por parte de las tres administraciones si bien insiste en que el Ayuntamiento no tiene ese análisis ni lo ha visto.

Después Sabrido pasa al ataque y opina que seguir hablando de que allí hay posibilidad de construir 1.300 viviendas «es malintencionado» ya que asegura que «están en suspenso» y el equipo de Gobierno municipal en el avance del POM lo que ha dejado por escrito es que en Vega Baja «no habrá vivienda residencial».

Al mismo tiempo asegura que el convenio firmado por el Ayuntamiento con el Estado y la Junta «lleva un proyecto de recuperación en cuatro anualidades» de forma que el presunto «ataque al parque arqueológico queda desmontado» y, bajo su punto de vista, incluso se ha superado lo del respeto a los restos, al paisaje y al patrimonio. Esta es su reflexión al ser preguntado por  que la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo ha resuelto  pedir más información a las autoridades de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Toledo sobre el proyecto urbanístico en la Vega Baja y la Peraleda, en la ciudad de Toledo.