El Parlamento Europeo mantiene abierta, a través de su Comisión de Peticiones, la demanda de amparo y protección integral para la Vega Baja y La Peraleda presentada por Antonio Zárate en nombre de la Plataforma Ciudadana Toledo: Sociedad, Patrimonio y Cultura. En consecuencia, va a solicitar dictamen a la Comisión de Medio Ambiente para que se pronuncie sobre el posible daño ambiental de las actuaciones urbanísticas en Vega Baja, Circo Romano y la Peraleda; pedirá a la Junta de Comunidades el estudio de georradar realizado en la zona en 2020, y del que no hay exhibición pública; y requerirá al Ayuntamiento el Plan Especial de Protección de la Vega Baja y la Peraleda.
Tan solo el portavoz del Grupo Socialista Ibán García del Blanco, se opuso a mantener abierta la demanda de amparo, argumentando, al igual que los técnicos de la Comisión de Peticiones, que estados miembros, como España, tienen suficientes organismos para cursar este tipo de quejas. La apoyaron, por su parte, el eurodiputado 'popular' José Manuel García-Maragallo, Jodi Cañas desde Ciudadanos, Jorge Buxadé de Vox y Agnès Evren desde el Grupo del Partido Popular Europeo.
Zárate apuntó que lo que estaba defendiendo ante la Cámara eran «valores patrimoniales y ambientales de Toledo y Europa». Porque hoy «el paisaje y los vestigios arqueológicos de Vega Baja y la Peraleda están más amenazados que en 2021». Recordó que son espacios que pertenecen al conjunto de Toledo, declarado Monumento por el Estado en 1940, junto a sus ámbitos de protección. Sin embargo, «el Ayuntamiento no garantiza los valores patrimoniales y ambientales de Vega Baja y Peraleda, en zona de protección de paisajes, arqueológica y su colchón, y sigue sin mostrar los informes ante la Unesco para justificar actuaciones como la construcción de bloques de cinco alturas junto al Circo Romano». Además, «en la Vega Baja, la modificación 28 del Plan General sigue vigente. Solo se han suprimido 1.300 viviendas sobre yacimiento arqueológico y se ha declarado suspensión de actuaciones, pero seguimos sin el Plan Especial de Protección requerido por la legislación y reclamado por la Real Academia de San Fernando al Ministerio de Cultura como condición previa para cualquier actuación». En su lugar, «se ha firmado un convenio de colaboración para actuaciones en la Vega Baja, pero su ámbito de intervención se reduce al veinte por ciento de la misma y de la Peraleda, y solo a tres de los cuatro Bic existentes, Circo Romano, Cristo de la Vega y el yacimiento arqueológico, fuera queda la Fábrica de Armas. El resto se mantiene en la indefinición y las actuaciones acometidas no han sido de protección del patrimonio, lo único que se ha hecho es venta en pública subasta a una empresa inmobiliaria junto al Circo Romano, anuncio de construcción de un gran aparcamiento, de un campo de fútbol y de sendas peatonales, todo sobre suelos arqueológicos y sin publicar el estudio de georradar encargado hace más de dos años por la Junta de Comunidades».
Mientras tanto, en la Peraleda, en Ayuntamiento ha aprobado un cuartel sobre 37.000 metros cuadrados y prevé un barrio para más de 9.000 personas «cuando hay disponibilidad de suelo urbano y la ciudad no crece, más bien pierde población, y las construcciones se harán en zonas de valor ambiental, en zonas de uso rústico y protegido y no urbanizable por el Plan General vigente, en un meandro del río de rica biodiversidad, de variada vegetación, abundancia de aves y aprovechamientos agrarios». Por otro lado, cuartel y barrio «invaden zonas de inundación, se encuentran en zona arqueológica y su colchón y en el cono visual de protección de la ciudad». Además, la impermeabilización del suelo sería contraria a la Agenda Urbana 2030 y las estrategias de naturalización de la Unión Europea y del Gobierno español contra el cambio climático.
«Eso solo se entiende por intereses especulativos y por la afirmación de que solo el Casco histórico dentro de la muralla es Patrimonio de la Humanidad, lo que entra en contradicción con los mapas de la Unesco de 1986 y 2013», argumentó Zárate. En todos estos mapas, explicó, se recogen las zonas del río protegido y su colchón. De forma que la previsión de construcciones en Vega Baja y Peraleda y el cuartel «pueden privar a Toledo de su calificación como Patrimonio de la Humanidad y a Europa de bienes de su patrimonio cultural y medioambiental».
Votación a favor. Después de esta intervención la respuesta técnica de la Comisión Europea se centró exclusivamente en los valores medioambientales. Nada sobre el patrimonio. Valoraron que la normativa europea cubre este tipo aplicable cubre las cuestiones de medio ambiente y exige que en determinadas cuestiones se haga un impacto ambiental. Como la normativa se ha transpuesto a la legislación española, invitaron a Zárate a acudir ante los órganos administrativos y judiciales nacionales.
En el mismo sentido, el socialista García Blanco entiende que existen cauces suficientes a nivel nacional para dirimir esta cuestión. A su juicio, el debate viene por el color político del Ayuntamiento. Y recordó avances como la eliminación del uso residencial en el avance del POM; el organismo de colaboración entre las tres administraciones y el proyecto de recuperación de Vega Baja. En la Peraleda, que no es parque arqueológico, se prevén viviendas en un POM que está todavía en información pública, no aprobado.
García-Maragallo fue muy crítico con la respuesta de la Comisión. A su juicio, «si esperamos a lo que hagan las autoridades nacionales, cuyos crímenes urbanísticos son los que estamos denunciando, o que se pronuncien los órganos jurisdiccionales, probablemente el daño estará hecho y será irreversible, muerto el enfermo, suspender la medicación». También se centró en la importancia del yacimiento visigótico más importante de Europa, «y si Europa no intervienen inmediatamente, el daño será irreversible».