El milenario Palacio de Galiana se abre a visitas culturales

Europa Press
-

Datado en el siglo XI, ha inaugurado una nueva modalidad de visitas culturales en la que el público podrá conocer la historia, evolución y restauración de este palacio, declarado Bien de Interés Cultural

El milenario Palacio de Galiana se abre a visitas culturales - Foto: EUROPA PRESS

El Palacio de Galiana de Toledo, datado en el siglo XI, en colaboración con la Asociación de Castillos y Palacios de España, ha inaugurado una nueva modalidad de visitas culturales en la que el público podrá conocer la historia, evolución y restauración de este palacio, declarado Bien de Interés Cultural.

El objetivo de este nuevo proyecto es poder compartir este monumento con los toledanos y seguir trabajando para que el palacio y los jardines sean sostenibles, según ha informado el propio Palacio en nota de prensa.

La unión del Palacio de Galiana a la Asociación de Castillos y Palacios de España (Spain Heritage Network) pretende contribuir a poner en valor el sector de turismo cultural de patrimonio histórico español.

Desde la dirección del Palacio de Galiana se está buscando la creación de sinergias con los principales guías turísticos y empresas de turismo nacionales para que la apertura sea un reclamo más en la oferta cultural que ya ofrece la ciudad de Toledo.

El edificio restaurado que se presenta es lo que ha pervivido de la almunia o palacio de recreo construido por el rey de la Taifa de Toledo Al Mamún en el siglo XI.

El Palacio de Galiana es un torreón mudéjar de planta rectangular construido en aparejo toledano de mampostería y ladrillo. Su piso bajo tiene un salón de recepciones con alcobas a cada lado que repite modelos bizantinos, un cuadrado con cuatro columnas centrales que forman en altura nueve espacios abovedados.

Los jardines que rodean el monumento son uno de los elementos más bellos de esta almunia regia. Entre sus ilustres propietarios hay que destacar a la Emperatriz Eugenia de Montijo, esposa de Napoleón III.

Asimismo, el matrimonio formado por Alejandro Fernández de Araoz y Carmen Marañón compró el palacio de Galiana en el año 1959 a los descendientes de la Emperatriz Eugenia y acometieron un proyecto de restauración de la mano del arquitecto y académico Fernando Chueca Goitia.

La restauración del edificio fue el proyecto del matrimonio Fernández de Araoz Marañón, que Carmen Marañón mantuvo vivo con igual ilusión y dedicación tras la muerte de su marido haciendo del palacio un lugar de encuentro de personalidades nacionales y extranjeras en donde les transmitía su amor por Toledo, tal y como había hecho su padre, el doctor Marañón, en el Cigarral de Menores.

Las visitas culturales del Palacio de Galiana tendrán lugar de miércoles a domingo en horario de mañana y tarde y se realizarán a través de una audioguía que el visitante podrá descargar en su teléfono móvil cuando llegue al palacio. El precio de la entrada tiene un coste de 8,40 euros y se puede adquirir a través de la página web www.palaciodegaliana.es.

«Un añadido más» a la oferta turística. La responsable del Palacio de Galiana, Sofía Palazuelo, ha señalado que antes utilizaban este monumento para un uso particular. «Venía la familia y lo disfrutábamos», ha detallado.

Además, hace cuatro años en este Palacio decidieron «poner en marcha una iniciativa de eventos, bodas, muchísimos rodajes y series históricas», ha informado.

Esta nueva iniciativa de recibir público para visitas culturales ha sido gracias a la demanda «sobre todo de toledanos y también de extranjeros antes de la Covid-19». Así, han decidido abrirlo ciertos días de la semana para «compartirlo y que sea un añadido más a la ciudad de Toledo».

El Palacio de Galiana quiere que con el tiempo vayan apareciendo en las guías «es un proceso que estamos trabajando y que estamos haciendo, pero la idea es que el Palacio de Galiana aparezca en las guías de Toledo», ha añadido.

Asimismo, se suma un poco a «lo atractivo» de la ciudad con la idea de llegar a ser «interesante para que el toledano lo pueda conocer, lo pueda disfrutar y que lo podamos compartir», ha señalado.

Carmen Marañón, hija del doctor Marañón y bisabuela de Sofía Palazuelo, fue la persona que rehabilitó el Palacio de Galiana. Además, compró este monumento en 1959 a los descendientes de la emperatriz Eugenia de Montijo, que se encontraba derruido tras la Guerra Civil.

«Ella tenía un proyecto muy bonito de intentar rehabilitar este monumento pero muere antes de poder concluirlo», ha destacado, por lo que ha definido a su bisabuela como «la artífice» de dicha rehabilitación.

La impulsora de esta restauración tenía mucho vínculo con Toledo, ya que Carmen Marañón era hija del doctor Marañón y desde pequeña iba al Cigarral de Menores con él. «Ella culminó su vida con esta rehabilitación y la verdad que lo hizo de manera impecable porque se rodeó de grandes profesionales», ha comentado.

Para visitar este monumento es importante «recordar a Carmen Marañón como la persona que le devuelve ese esplendor al Palacio de Galiana», ha afirmado.