El Pleno del Ayuntamiento de Toledo aprobó ayer por unanimidad instar a las autoridades competentes para que tomen las medidas legales necesarias con el fin de que los agentes de la Policía Local puedan acceder a la jubilación antes de los 65 años por medio de coeficientes reductores que tengan en cuenta la naturaleza especialmente penosa, tóxica, peligrosa e insalubre de las actividades en las que se ven obligados a colaborar así como los elevados índices de mortalidad de la profesión.
El acuerdo será remitido a la Secretaría de estado de Seguridad Social, la Dirección General de la Ordenación del Territorio de la Seguridad Social y la Federación Española de Municipios y Provincias con el fin de que propongan al Congreso de los Diputados la modificación en materia de Seguridad Social.
Para lograr ese adelante de la jubilación proponen que se les apliquen los coeficientes reductores ya existentes en la ley General de la Seguridad Social así como que el Gobierno reconozca que se trata de una profesión de riesgo e incluya un catálogo de enfermedades que ayude a proteger su salud.