El secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, se refirió ayer en la rueda de prensa celebrada en Talavera a la derogación de la Orden que reducía el horario de 21 Puntos de Atención Continuada, entre ellos el de La Pueblanueva, y pidió el cese del consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz. «Es muy complicado encontrar a un político con tanta soberbia y tanta opacidad», recalcó y agregó que «amenazó» con otros recortes sanitarios si no avanzaba la mencionada orden. Asimismo, añadió que los ciudadanos esperan esta destitución «inmediata» del consejero que más está haciendo «por desmantelar la sanidad pública».
Page lamentó que se haya presentado en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha «con nocturnidad» la resolución a las puertas del puente de Semana Santa y reprochó a la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, que no haya dado una explicación a la opinión pública. «Lo mínimo que se merecen los miles de ciudadanos afectados es una explicación, cuando no han querido ni recibirles. Es un atropello democrático el que han planteado en todos estos meses», aseveró el representante socialista.
A su vez, Emiliano García-Page, quien reclamó la consideración de la sanidad como un derecho, subrayó que el Gobierno de Castilla-La Mancha no asume la responsabilidad y tachó al Gobierno de Cospedal de soberbio. «Incluso ahora echan la culpa a los jueces», indicó y agregó: «Cospedal tiene que pedir perdón a las miles de familias que se han movilizado en Castilla-La Mancha reclamando derechos reconocidos en las leyes porque han sido meses de sufrimiento y zozobra».
El secretario regional de los socialistas acusó a la presidenta de la Junta de intentar convertir la sanidad pública en Castilla-La Mancha en un «enorme negocio para unos pocos» y lo amplió al resto de España con el Gobierno del Partido Popular. «No tengan la más mínima duda de que lo que intentan numerosos gobiernos autonómicos es convertir la sanidad pública en un negocio para unos pocos», dijo.
«Una victoria del pueblo».
La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, celebró ayer la derogación del cierre de las urgencias nocturnas y consideró que la decisión del Gobierno de Castilla-La Mancha supone una «grandísima victoria del pueblo, con sus alcaldes al frente».
En un comentario en su perfil de Facebook, la dirigente socialista remarcó que esta decisión ha sido posible tras la «lucha de mucha gente» en los 21 municipios afectados, «sobre todo de muchas mujeres que no se han resignado nunca». «Cospedal pierde, ellas y ellos ganan. Y David venció a Goliat», apostilló Valenciano, dando una «enhorabuena especial» al líder de los socialistas en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, por haber liderado las protestas.
Además, la vicesecretaria general del PSOE criticó que el Gobierno regional haya publicado la derogación de madrugada. «A ver si pasaba desapercibida en Semana Santa», destacó.
Para Izquierda Unida de Castilla-La Mancha la decisión de derogar la orden que dictaba el cierre de las urgencias debería ser el preludio de un cambio en las prioridades y del modelo sanitario y de servicios sociales.