Palabras escritas por Lorca en 1931 que tienen todo el sentido del mundo en 2016. Juan Sánchez, el director de la Biblioteca de Castilla-La Mancha, ubicada en el emblemático Alcázar de Toledo, centró ayer su pregón inaugural de la XI Feria del Libro -abierta hasta el 15 de mayo en Zocodover- en el discurso ‘Medio pan y un libro’ del poeta granadino, pronunciadas en la inauguración de la biblioteca de su pueblo natal.
Como si el escritor hubiese redactado el texto hace dos días, Sánchez leyó una parte clave: «No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí…a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio del Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social».
El director de la ‘gran’ biblioteca pública de Castilla-La Mancha reivindicó la importancia de la cultura en una agenda ‘economizada’ en la que los dirigentes políticos centran, por norma, sus propuestas y sus presupuestos en la economía, «aunque algunos piensan en clave de cultura», reconoció.
Por eso, reclamó «alto y claro», con las elecciones generales a la vuelta de la esquina, «que todos los partidos piensen en los ciudadanos y que, en el caso de la cultura, apuesten por programas vinculados a las bibliotecas públicas, a la lectura, en potenciar los hábitos lectores».
Lo hizo tras ensalzar el papel que juegan para crear una sociedad libre y crítica. «Necesitamos libros, información, ideas, debate, proyectos, y para ello las librerías y las bibliotecas son los buques insignias para conseguir una sociedad más lectora y más autocrítica», invitando a «impregnar a los niños y jóvenes de una verdadera pasión por la lectura» contra la obligación de leer.
Un total de 21 expositores, entre librerías, editoriales e instituciones, se dan cita hasta el próximo domingo en las casetas de la plaza de Zocodover. La zona está techada este año para que los visitantes a la feria no se mojen en el caso de que llueva. La alcaldesa y buena parte de su equipo de Gobierno asistieron ayer a la inauguración oficial.