«Estamos consolidando la racionalización en el gasto», aseguraba Gómez-Hidalgo, y un elemento determinante para ello ha sido la transferencia del Hospital. «Un servicio -aclaraba no obstante Gómez-Hidalgo- que se sigue prestando a los ciudadanos pero por parte de la administración que tiene la competencia, que es la Comunidad Autónoma».
Ahora bien, sigue generando gastos porque, al margen de los 10 millones que se reciben del Fondo Social de Asistencia procedente del Gobierno central y que se transfiere de forma automática al Gobierno regional, aún quedan años por pagar el coste de la transferencia que ronda los 5,7 millones cada anualidad.
Sin embargo, en gastos de personal el ahorro es considerable, un gasto que ya se dejó sentir el pasado ejercicio -porque solo se consignó una mensualidad salarial aunque se tuvo que pagar hasta octubre las nóminas con suplementos de crédito- y que en esta ocasión representa una reducción del 4%.
En cuanto a la Residencia Social Asistida San José, y a pesar de que se está en trámites de dejar de prestar el servicio de Centro de Día Psicogeriátrico y de Enfermos de Alzheimer, el presupuesto global se reduce de forma insignificante, porque pasa de 16.676.000 euros del pasado ejercicio a 16.435.000 consignados para este año. Es decir, 241.000 euros menos, que se corresponde a partidas como «maquinaria, mobiliario o limpieza». En el capítulo de personal , no sólo no baja sino que aumenta, de manera anecdótica, eso sí, un 0,13%, de 12.709.000 euros de 2013 a 12.726.589 euros de este ejercicio.
Y en cuanto a la polémica, aclaraba Gómez-Hidalgo que «no se va a dejar de prestar este servicio, si no que se va a hacer de forma más eficaz y eficiente».