La presidenta de la Junta de Comunidades, María Dolores Cospedal, defendió ayer en el Senado el cierre de los servicios de urgencia en 21 municipios de la región a partir de las ocho de tarde.
Cospedal, que realizó estas declaraciones después de presidir una reunión del Grupo Parlamentario Popular en la Cámara Alta, negó con rotundidad que la Junta haya quitado los servicios de urgencia nocturnos en la región, y precisó que esta medida sólo se ha adoptado en unos municipios con una población muy pequeña y que tienen servicios de urgencia a quince minutos.
«En nuestra región, en Castilla-La Mancha, no hemos quitado los servicios de urgencia nocturnos. No es verdad. Se han quitado servicios de urgencia a partir de las ocho de la tarde en 20 municipios con una población pequeña que tienen servicios de urgencias a quince minutos (...) No se han quitado los servicios de urgencia con carácter general», afirmó.
Por su parte, el portavoz del Partido Popular en las Cortes regionales, Francisco Cañizares, negó que «sólo con el dinero que el consejero de Sanidad va a gastarse este año en propaganda se puedan mantener los PAC», tal y como aseveró García-Page en TVE ayer.
Cañizares tachó de falsas estas afirmaciones del secretario general del PSOE en la región, al igual que sus palabras sobre que el Partido Popular esté poniendo «en peligro» la sanidad castellano-manchega.
En este punto, recordó que el PSOE tenía «una agenda oculta» de cierre de varios hospitales y centros de salud en la comunidad autónoma y «no de reducción de horarios». Plan que se vio truncado al alcanzar el Partido Popular la Presidencia.
A preguntas de los periodistas sobre qué hospitales y centros de salud tenían los días contados, Cañizares confirmó que el PSOE no trasladó al Gobierno los nombres, pero «todos sabemos quiénes formaban parte de las reuniones de traspaso de poderes». «Esos hospitales y centros de salud tienen hoy garantizada su viabilidad», dijo el portavoz ‘popular’.
Por otro lado, recordó que los PAC no atienden, por lo general, situaciones graves de salud, como un infarto. «Alguien se equivocaría si acudiera a un servicio de urgencia como éste si le estuviera dando un infarto». Para su atención -añadió- están ya las UVI’s o los helicópteros medicalizados. «Mal servicios haríamos a los castellano-manchegos si pusiéramos un médico en cada casa, pero mañana tuviéramos que cerrar hospitales».
caso de Honrubia. Por otra parte, Cospedal declinó valorar la decisión de dimitir de los cuatro concejales del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Honrubia (Cuenca), y de los siete suplentes que completaban la lista del grupo, como medida de rechazo ante el cierre del Punto de Atención Continuada del pueblo. Se limitó a señalar que estos concejales «están en su derecho de hacerlo», y no hizo ninguna valoración más sobre esta cuestión.
Similares declaraciones hizo el portavoz del Grupo Parlamentario Popular. Cañizares dijo entender que los concejales deseen que sus municipios dispongan de los mayores servicios posibles pero, insistió, en que quienes tendrían que dimitir serían los concejales socialistas por arruinar a la región. No obstante, confió en que el partido no impondrá ningún ‘castigo’ sobre estos ediles.