La resaca de las palabra del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, llegó ayer hasta el Consejo de Ministros, donde la vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que el Ejecutivo analizará con «rigor y prudencia» el programa de compra de deuda para tomar una decisión sobre el rescate en función de los intereses de los españoles.
Así lo señaló en la rueda de prensa posterior a la reunión ministerial, donde explicó que las cosas «tan importantes» para el interés general y el futuro 45 millones de personas deben analizarse «con calma y prudencia».
«Son decisiones que no se pueden tomar a bote pronto ni de la noche a la mañana porque tienen implicaciones importantes para el país y para el futuro de los españoles», sentenció la portavoz, tras asegurar que el Ejecutivo sopesará «todos y cada uno» de los elementos. «Eso es lo que vamos hacer», insistió ante los periodistas que intentaban infructuosamente, a través de sus preguntas, que la política fuera más allá.
la patronal, con prisa. Aunque la número dos del Gabinete pidió tiempo, no todos los sectores se alinearon con esta postura. Los empresarios optaron por situarse al otro lado de la línea para requerir que si se va a pedir la ayuda europea se haga cuanto antes. Saénz de Santamaría fue entonces categórica ante los comentarios de CEIM, cuyo presidente, Arturo Fernández,requirió al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que tome una decisión lo antes posible.
«Es una buena noticia que Draghi haya anunciado que nos pone la carretera para que nosotros podamos pedir la ayuda controlada, y ahora Rajoy estará tomando las decisiones necesarias. Ahora es el momento oportuno para que el Gobierno decida si quiere pedir esa financiación o esperar», recalcó.
Ante tale palabras, la popular les pidio, no solo la misma prudencia que están teniendo en el Ejecutivo, sino responsabilidad: «Respeto la opinión de todos, pero es el momento de que todos seamos muy prudentes», insistió.
Asimismo, requirió que se sumen a esta actitud y que eviten palabras vanas sobre el tema a todos los dirigentes del país. «Se lo pido a todo el mundo, y a los líderes políticos más, sobre todo cuando algunos como él -en referencia a Alfredo Pérez Rubalcaba- han estado en esta misma mesa que estamos hoy», apostilló.
En cuanto a las condiciones de la posible ayuda, la portavoz aseguró que todavía no se han detallado, aunque se irán concretando en los próximos días, teniendo siempre en cuenta la regulación de los mecanismos que comprarán la deuda. En este sentido, recordó que esta semana entrante se celebrará un Eurogrupo y un Ecofín (reunión de ministros económicos) y que allí se seguirá hablando y analizando el tema. A su parecer, hay que respetar los procedimientos, que serán además los que aportarán un conocimiento «certero» sobre el asunto.
En cualquier caso, aseveró que la nueva posición que la entidad monetaria europea supone «un punto importante», ante todo, para garantizar la irreversibilidad del proyecto del euro, puesto que pone de manifiesto su intención de actuar como autoridad monetaria y cumplir sus obligaciones para defender y garantizar la estabilidad del euro.
Otros temas. En la sesión del Consejo de Ministros se tomaron, además, otras decisiones, como el pago que el Ejecutivo hará al Ministerio de Defensa de 1.782 millones de euros para atender a la deuda acumulada por entregas realizadas en los grandes programas de armamento durante los años 2010 y 2011 y para pagar los compromisos fijados para el presente ejercicio.
Además se dio luz verde al proyecto de Ley que dará lugar a la creación del Parque Nacional de Guadarrama, entre Madrid y Castilla y León, que contará con más de 33.000 hectáreas.