Lucas Búa todavía no sabe dónde está su techo. Ayer se proclamó campeón de España de 400 metros en pista cubierta después de otra carrera grandiosa en la que fue muy superior a sus rivales, mostrando un poderío que asusta por su juventud. El toledano se colgó su segundo oro de la temporada después del cosechado en el Nacional Promesa hace unas semanas y, de paso, se llevó a casa un billete de avión para volar el próximo 18 de marzo al Campeonato del Mundo indoor que se celebrará en Portland (Estados Unidos).
El del FC Barcelona consiguió brillantemente su objetivo con un paso por el 200 más moderado, 22.28, que el del sábado en la semifinal, donde también se exhibió. En la segunda vuelta Búa echó el resto, con fuerza y determinación, perseguido muy de cerca por el madrileño Mark Ujakpor.
El velocista capitalino alcanzó la meta en 46 segundos y 65 centésimas, un tiempo que supone alcanzar la mínima para el Mundial y que, lógicamente, es la mejor marca española del año. Ujakpor se adjudicó la medalla de plata con 47.14, mientras que el bronce fue a parar a su compañero de equipo, el catalán Pau Fradera, con 47.54. Los 46.65 colocan a Lucas Búa como séptimo atleta de todos los tiempos en España y segundo en categoría promesa, pues no hay que olvidar que tiene 22 años y está en su último año dentro de esta categoría.
La progresión del toledano sigue siendo meteórica y ya se ha colocado en el número 1 de los velocistas nacionales de 400 metros, tras lograr el título al aire libre el pasado verano en Castellón. Esta campaña ya la comenzó prometiendo y desde entonces lo único que ha hecho es superarse a sí mismo. Afinales de 2015, participó en Antequera en un control en pista cubierta en el que marcó 47.45. Sin embargo, el tiempo lo superó con creces en Valencia en la Copa del Rey y de la Reina disputada en la capital del Turia el 30 de enero. Logró el triunfo con un registro de 47.07 que ya dejaba entrever que Búa iba a por todas en 2016. Su crecimiento fue mayor con el oro logrado en el Campeonato de España Promesa celebrado en San Sebastián el 20 y 21 de febrero. A pesar de no hacer un buen tiempo en la semifinal (47.87), en la carrera definitiva lo dio todo y entró en primera posición con 47.03, mejor marca de la temporada hasta ese momento, ya que en el Centro Deportivo Municipal Gallur de Madrid rompió de nuevo todas las expectativas con los 46.65.
Por lo demás, hay que recordar que el velocista de la Ciudad Imperial inscribió su nombre en el récord nacional de 500 metros con el tiempo de 1:01:84 registrado en la pista de la Escuela de Gimnasia el pasado 16 de enero, dentro del control organizado por el Club Atletismo San Ildefonso.