Cazalegas ha sido uno de los municipios de la provincia a los que se han negado las ayudas por parte del Ministerio de Hacienda para pagar los gastos atrasados a proveedores, ya que su plan de ajuste es considerado como «desfavorable» por parte de este órgano, así como por la Secretaría de Estado de Administraciones Públicas y la Secretaría General de Coordinación Autonómica y Local.Tras analizar la información contenida en el plan de ajuste de este ayuntamiento, la Secretaría General lo valora «desfavorablemente» por tres motivos, uno de ellos porque el periodo medio de pago a proveedores es superior al legalmente establecido. Otra de las razones aportadas en el documento remitido al Ayuntamiento de Cazalegas explica que «las previsiones de ingresos corrientes no son consistentes con la evolución de los ingresos obtenidos por la entidad local en los ejercicios 2009 a 2011», además de añadir que los ingresos por operaciones no financieras «no cubren los gastos de la misma naturaleza».Ante este rechazo por parte del Ministerio, el alcalde del municipio, Amando Blanco, reconoce su frustración ante la deuda de unos 330.000 euros, aunque señala que «buscaremos otras fórmulas, como hacer un plan de pagos, además de hablar con los proveedores, a los que ya hemos pagado una parte de la deuda». El primer edil de Cazalegas, de Izquierda Unida, denuncia por otro lado que la Junta de Castilla-La Mancha adeuda a esta localidad 250.000 euros, una cantidad «reconocida» por la administración regional, pero de la que no han recibido ningún ingreso desde hace un año.planes aprobados. Otras localidades de la comarca sí han visto aprobados sus planes de viabilidad, como Oropesa, Belvís de la Jara y Mejorada, entre otros municipios que solicitaron esta ayuda pública, y a los que se ha concedido un crédito para pagar a proveedores con intereses a 10 años, los cuales han visto sus solicitudes aprobadas a través de la página web del Ministerio de Hacienda.Así lo confirmó ayer el alcalde de Oropesa, José Manuel Sánchez, quien considera esta ayuda «un aliciente para poder pagar», aunque advierte de que «aún hay mucho dinero por pagar, algo que no debe afectar a los vecinos». El edil oropesano, del Partido Popular, recordó que el ajuste de gastos ya comenzó desde que entró a gobernar en el municipio y que desde entonces ya ha adoptado medidas de ahorro, algo que continuará «poco a poco».«En las Jornadas Medievales hemos gastado 18.000 euros este año, por los 48.000 del año pasado», señalaba José Manuel Sánchez, quien recuerda la deuda de más de un millón y medio de euros con que se encontró su equipo de Gobierno, lo que le ha obligado a reducir un 50 por ciento el gasto de los festejos, así como renegociar los contratos de suministros y suprimir sueldos adicionales a la junta de gobierno, entre otras medidas de austeridad. El plan de ajuste de Oropesa requiere una aportación de más de dos millones y medio de euros, a lo que se suman los 800.000 euros que habrá de pagar en conceptos de intereses.Por su parte, los alcaldes de los municipios de Belvís de la Jara y Mejorada, José Luis Fernández y José María Cuadrado, respectivamente, insistían en que su plan de viabilidad no hubiera sido necesario si la Junta les hubiera pagado una parte del dinero que les adeuda. «Entiendo los problemas de dinero de la Junta, pero su impago afecta a los servicios sociales de los 21 municipios de la Sierra de San Vicente», comentaba el alcalde de Mejorada, quien se ha visto «obligado» a solicitar estas ayudas por la deuda de la Junta de 385.000 euros, un tercio del presupuesto de la localidad en 2011.De igual forma se expresaba el primer edil de Belvís de la Jara, quien consideraba «denigrante» el hecho del nuevo endeudamiento debido a los impagos de la Junta desde el pasado año, unos 950.000 euros. La ayuda aprobada a la localidad jareña es de 304.000 euros, cuyos intereses «debería pagar la Junta», apuntaba Fernández, preocupado además por la ausencia de las subvenciones tanto regionales como europeas que afectan a los servicios sociales.