Eran poco más de las 13:00 horas de ayer cuando dos individuos entraron en una joyería situada en la céntrica avenida Parque de la localidad de Ocaña. En aquellos momentos el establecimiento estaba
vacío. Tan solo su propietaria se encontraba en el interior. Los hombres, de nacionalidad rumana y ucraniana, no tardaron en demostrar que no venían precisamente a comprar. Con unas bridas, y tras amenazar a la mujer, procedieron a maniatarla para, acto seguido, comenzar a desvalijar la joyería.
Todo habría salido según lo planeado de no ser, tal y como confirmaron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil, por la colaboración ciudadana. Y es que, un vecino que en esos momentos se encontraba en la zona se percató de que algo no iba bien en el interior de la conocida joyería. Acto seguido decidió encaminarse hacia el cartel de la Benemérita en Ocaña, que se encuentra precisamente en la misma manzana de la joyería, a unos minutos andando.
Los agentes no tardaron en reaccionar y, junto a los agentes de la Policía Local de la localidad, que también fueron alertados, se personaron en cuestión de segundos en la puerta del establecimiento.
En ese momento los dos atracadores aún se encontraban en el interior. No les había dado tiempo a salir con su botín y fueron detenidos.
Los dos individuos no portaban en el momento de la detención ningún tipo de arma, lo que facilitó que fueran reducidos.
La propietaria de la joyería tampoco resultó herida, y los agentes procedieron a soltar las bridas que la maniataban y a prestarle asistencia, alarmada como estaba ante la situación.
Los dos atracadores fueron conducidos detenidos al cuartel de la Guardia Civil de Ocaña. Una vez más, la colaboración ciudadana ha demostrado ser fundamental para evitar un acto delictivo.